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martes, 25 de noviembre de 2014

Come Back



Hoy me prepuse volver a escribir, cualquier cosa, pero escribir y acá estoy.

Ha pasado más de dos años y estoy intentándolo otra vez, no por ustedes, ni por nadie en especial, sino por mi, porque espero que esto sea otra vez un medio para desahogarme, para plasmar todos esos sueños, que fueron parte de mi pasado y creo que no volverán a ser parte una vez más de mi futuro, porque en fin y en cuentas así es la vida, pareciera que tenes todas las armas para comerte al mundo, para intentar devorarlo todo, impulsado de tus sueños y de la fuerza de tu alma, sola, sola, contra el mundo, contra la sociedad, contra la monotonía... pero madurar te enseña que eso es casi imposible, surreal, y duele, siempre duele la realidad, siempre duele el querer y no poder.

Antes, tenía un vacío enorme en el alma y lo plasmaba en letras, todos esos sueños, esos deseos, eran parte de mis miedos y de mis anhelos
Hoy me di cuenta de que solo el desamor o la pasión te impulsan escribir con el corazón, con el alma y la pasión, perdón si esto es desordenado, caótico  e inentendible, pues no espero volver a escribir como antes, sino que espero transmitirles algo, como siempre he querido, si es dolor, que el dolor se sienta en cada palabras, que se sienta en cada palabra, porque escribir por escribir, es tan fácil, tan premeditado y corriente, pero transmitir algo, convertir todos los fantasmas de tu interior en palabras es tan difícil como él que busca una aguja en un pajar, como el que desea que ese amor no correspondido se transforme en real.

Hacía mucho que no leía historias de amor ni nada parecido, porque  creía que el amor era solamente eso, historias, sueños, anhelos, que se quedarían en mi mente para siempre, como una expectativa a futuro. Pero todo cambió cuando la conocí, cuando conocí su interior y me enamoré profundamente, creo que desde ese día acepte, que mi historia, sería obscura, negra y dolorosa, llena de miedos, de expectativas y sueños inconclusos y así es, así fue, así será; pero escribir, escribir va a ser la parte en la que no me rinda a mis miedos, a mis sueños de tenerla por lo menos en mi mente.

Porque en mi mente, ella es La turca sin un destino fijo y es esa Francesca que me ama más allá de sus miedos, de sus fantasmas y de su egoísmo... en mis sueños ella es todo eso y mas.


i.loveelectro@hotmail.com


En estas semanas, estaré publicando la continuación de Francesca si es que así lo quieren.